El 27 de Marzo de 2014, después de exigir sin descanso, con argumentos firmes, nuestro derecho a ser consultados de acuerdo al Convenio 169, transgredido por el SEA en complicidad con la empresa minera Paguanta, la Comisión Regional de Evaluación Ambiental, calificó negativamente el EIA del proyecto “Sondajes de Prospección Paguanta”, demostrando su consciencia y objetividad al respecto.
Pero el centralismo, en acuerdo con las élites empresariales y decididos a favorecer la inversión minera, sin importarles la contaminación y la voluntad de las regiones, decidió en Santiago, en Julio del mismo año, a través del Comité de Ministros del SEA, acoger la reclamación de la empresa y calificar favorablemente el EIA presentado, volviendo a vulnerar nuestros derechos.
Desde entonces, nos hemos visto obligados a mantener esta lucha, presentando dos recursos contra esta medida administrativa que vuelve a poner en riesgo, la salud y el futuro de una zona donde miles de habitantes producen muchos de los alimentos que diariamente llegan a las mesas de las ciudades de la costa y el país, y constituyen el sustento de aquellos que no desean ver su territorio devastado por la ambición de unos pocos que solo buscan minerales para sacar del país y obtener las simples ganancias para sus cuentas, dejando solo despojos para quienes nos veremos afectados si consiguen su objetivo.
Hoy, en el desarrollo de esta lucha por seguir existiendo y desarrollarnos según hemos decidido, como es nuestro derecho consagrado por ley, tenemos un nuevo reto, estar presentes en las instancias de revisión de estos recursos, en la Corte de Apelaciones y el Tribunal Ambiental, en Santiago. La primera, este miércoles 29 de Abril de 2015, a las 15:00 horas, en el Tribunal Ambiental.
A los ciudadanos conscientes de nuestro país y a los hermanos de todos los pueblos originarios, invitamos a unirse en esta lucha para preservar las condiciones de vida naturales del territorio y fortalecer uno de los polos de desarrollo regional más postergados del país y en la Región de Tarapacá como es la agricultura de los valles interiores. Especialmente, a los hermanos de las regiones Metropolitana y de Tarapacá. La metropolitana, porque es allí donde aún se siguen tomando decisiones sobre el país y en la tarapaqueña, porque es allí donde se sentirán los efectos de esta terrible resolución.
Basta de no ser considerados en las decisiones que afectan a nuestro futuro, como en la aprobación de proyectos mineros contaminantes, la instalación de carreteras concesionadas sin consulta, la instalación de embalses en los ríos de los valles interiores o centrales termoeléctricas en la costa, ambos para la minería, en la destitución de autoridades regionales cuando no siguen los lineamientos dictados desde el centralismo. Basta de negligencias en las autoridades que empeoran los efectos de las catástrofes de la naturaleza, en la no construcción de Hospitales donde son necesarios, basta de la corrupción y el aprovechamiento de los políticos y los empresarios acaparadores del país como vemos hoy, etc.
Es tiempo de tomar nuestro lugar en la renovación del país, respetando los derechos de todos y cada uno, con una Constitución Política democrática, con verdadera regionalización, con educación de calidad para todos, inclusiva y sin lucro y dando lugar a la diversidad cultural propia de Chile con el reconocimiento de los derechos de los pueblos originarios, etc.
¡NO A PAGUANTA! ¡CH’AMA – KALLPA – NEWEN – … – FUERZA!