Critican a muni de Illapel por negocio “Somos Choapa” impuesto por Los Pelambres

logoLa invitación de una entidad no pública, a los habitantes de Illapel para participar en un llamado “Cabildo”, para generar una instancia de participación o en resumen, una jornada de vacunación de voluntades para aquellas personas que tienen anticuerpos contra las grandes mineras que desarrollan sus proyectos en la zona, llama la atención por lo siguiente.

Primero, no se entiende porqué la Municipalidad se pone a la sombra de Minera Los Pelambres. Si bien es cierto, no podemos pedir que a priori la entidad comunal se enfrente con la empresa privada, si es cuestionable que se utilice a la municipalidad para “validar” estas instancias que forman parte nítida de una estrategia comunicacional del grupo inversionista. Perfectamente la minera pudo haber efectuado su campaña por su cuenta sin meter a la municipalidad, pero bueno, ya hay un compromiso de dos mil y tantos millones para invertir en “obras de confianza”, así que difícil hacerle la desconocida.

Segundo, la sociedad civil, llámese juntas de vecinos y otras organizaciones comunales, tiene garantizado por ley (que posiblemente sólo conoce quién la inventó) la participación en las decisiones que la autoridad comunal vaya ejecutando en su gestión. Esa ley, la número 20.500, obliga a la municipalidad a ejecutar una serie de acciones para validar las opiniones de los actores civiles interesados en el desarrollo de la comuna. Tiempo atrás, publiqué un artículo en este blog:http://acastro2012.wordpress.com/2012/11/13/participacion-ciudadana-illapel-informado-capitulo-1/ con la intención de explicar en detalle su aplicación y efectos.

Tercero, nosotros, los vecinos de Illapel, comunes y corrientes, al elegir a nuestros representantes, debemos velar por que ellos sean capacitados y capaces de hacer valer nuestras voces y opiniones, de lo contrario, llegaremos a esto, en que una empresa privada, asume un rol que le corresponde a la autoridad comunal, y a través de prebendas disfrazadas de inversiones sociales y aprovechando el descuido regional y lo escuálido del presupuesto estatal, consigue difuminar la legítima capacidad vecinal de fiscalizar que la actividad extractiva y productiva se desarrolle de manera sustentable y con los retornos moral y económicamente justos para todos los habitantes de la provincia, aunque cuando se trata de bien común, muchas veces nuestra mala educación nos lleva a restarle valor a lo que no nos ha costado nada, el patrimonio natural, arqueológico y medioambiental, en el cual la naturaleza nos ha permitido nacer.

Fuente: @amable_castro

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

*